Aunque la entrega conchil del Zinemaldi se celebró hace cuatro días, este es mi especial premios festivaliles off-the-record, aquellos que nunca podrán verse en TV:

* Perla XXL para Terry Gilliam por ese maravilloso clásico instantáneo que es The imaginarium of Doctor Parnassus. ¡Ese enorme Christopher Plummer! (¡que buen Dumbledore habría sido!). ¡Ese genial Tom Waits! Thanks por este film, Mr Gilliam!

* Cardo de mar al/a más “bordeline” para Carmen Machi por romper y negarse a firmar la foto que un fan le había sacado el día anterior.

* Ostras al/a más sexy para Jim Morrison por el interesante documental When you’re strange: a film about The Doors de Tom DiCillo.

* Sirenita a la más ídem para Saffron Burrows y su 1’85 cm de elegancia, charme y discreción. A su lado, el ácido y parsimonioso Antonio Gasset y el resto de los miembros del jurado Nuevos directores parecían hobbits.

* Tinta de calamar para Mother de Bong Joon-ho o esa historia negra negrísima (con toques de humor aún más black) de una mamma detective empeñada en demostrar la inocencia de su hijo aunque se le vaya la life en ello.

* Delfín para Sir Ian McKellen por su encanto y carisma. A la organización del Zinemaldi se le llena la boca con él y no es para menos. El mago McKellen ha sido simpático, locuaz, solícito, humilde, inteligente, educadísimo… y donostiarra. Lució como nadie la camiseta de la candidatura de San Sebastián como ciudad europea, amén de la txapela en la entrega del premio Donosti… ¡y se marchó de nuestras tierras con ella!.

* Medusa a la pregunta más irritante para “¿Y no has visto a Brad Pitt?”. No, leñe, no. Pero he tenido la suerte de tener presentaciones y coloquios en la mayoría de las pelis que he visto. Me ha hecho una ilu loca conocer al loco entrañable Terry Gilliam (y su sempiterno look hawaiano) o escuchar las emotivas words de Bahman Ghobadi sobre No one knows about persian cats. Este último se está convirtiendo, además, en uno de mis héroes.

* Espuma de mar al mejor Pelo Pantene para Tom DiCillo. Cito textualmente: “Durante su estancia en Donostia habrá ocasión de comprobar, una vez más, su pericia en la ejecución de esa suerte capilar consistente en dar seco golpe de cuello para recolocar la melena”.
* Alga Kombu a lo más verde para la protesta frente al Kursaal de todos los directores iraníes presentes + espontáneos solidarios contra la política del presidente de la república islámica, Mahmud Ahmadineyad, un hombre que si ha cometido fraude electoral, ha sido exclusivamente cumpliendo las órdenes que Alá le transmitió a través del profeta. Juas.
About la peli de Hana Makhmalbaf sobre las elecciones iraníes, Green Days, las opiniones fueron encontradas. Yo la vi con ojos de documental y la aprobé justito. Luego descubrí que no, que era una película, y la suspendí.

* Coral al cutis de porcelana para Naomi Watts y su belleza in black durante la presentación de Mother and Child, el último trabajo del retoño de Rodrigo García, que además de la película, llegó con su tirria a las (inevitables) comparaciones paternas (es figlio de Gabriel García Marquez).

* Cangrejo Sebastián al/a más curiosón para Quentin Tarantino por meterse entre pecho y espalda de su camisa de cuadros 3 sesiones seguidas del ciclo Richard Brooks, ese director que, a excepción de Cayo Largo, La gata sobre el tejado de Zinc o Dulce pájaro de juventud, para mi era un gran desconocido.

* Caballito de mar a lo más emotivo: la dedicación “A film by Heath Ledger and friends” al final de El imaginario del Doctor Parnassus. Pelos de punta.

* Pulpo Fiction al motor del Zinemaldi: el público. Aunque muchos sean ñoñocinefilos, algo más tiene que haber para que se llenen puntualmente todas las salas, ciclos La contraola, Horizontes latinos y La contraola included.

Y hasta aquí mi 57 edición del Zinemaldi. Gracias a los pocos pero selectos lectores que me han acompañado en mis crónicas 🙂